viernes, 5 de octubre de 2012

¡Ya no se persignan como antes!


La sotana la lleva la mujer


Desde San Pedro hasta Benedicto XVI, ha habido muchos papas, 265 para ser exactos. Todos ellos han sido hombres porque como su mismo nombre lo dice “papa” viene de la palabra griega “pappas”, lo cual quiere decir “padre”. Pero, ¿Alguna vez has pensado en la posibilidad de que hubiera existido un papa que en realidad era una mujer?
A pesar del machismo con el que la Iglesia Católica siempre se ha manejado, existe una versión -cabe destacar- no oficial de que en el siglo IX y sin conocimiento de la Iglesia, una mujer dirigió el destino de la religión más poderosa del planeta.
Seguido de la muerte del Papa León IV, fue  elegido como papa John de Mainz, quien ocupó el cargo durante dos años siete meses. Fuentes no oficiales del Vaticano revelaron que John era en realidad “Joan”, es decir una mujer.
Incluso la historia o el mito va más allá de una simple idea, puesto a que se dice que la Vicaria de Cristo en una procesión dio a luz al hijo que esperaba de su sirviente más cercano. Tras este acontecimiento, algunos dicen que murió apedreada y otros tantos dicen que murió a causa del parto casi inmediatamente. La calle donde ocurrió este suceso fue rebautizada como “Vicus Papissa” lo cual quiere decir calle de la mujer papa.


Todas estas historias comenzaron a consolidarse a partir de los siglos XII y XIII gracias a los dominicos Jean Mailly, Etienne de Bourbon y Martin de Troppau. Cada uno relataro lo que había ocurrido con Juana La Papisa con algunas variaciones, pero en general las versiones eran muy similares.
Tres siglos después, la papisa era vista como no sólo un mito, sino un personaje histórico al que dedicaron varias obras de arte y esto es lo que nos da la pistas que nos han llevado a pensar que Juana la Papisa realmente pudo haber existido tal y como nos la pintan. Martín Lutero dijo haber visto una estatua en roma dedicada a Juana y a su hijo. Esta estatua antiguamente se llamaba “Papa Juan VIII, una mujer inglesa”, título que después fue cambiado a “Papa Zacarías”.  Hoy en día hay mucho material sobre la supuesta mujer que se convirtió en papa y engañó al mundo. Existen escritos, libros, novelas e incluso dos películas dedicadas a esta historia: La primera de 1972 llamada La Papisa Juana y la segunda y última de 2009 llamada La Pontífice. 


                                                        


A pesar de los rumores que ha habido acerca de la pontífica, por otro lado también se dice que el papa Juan VIII era sumamente afeminado y que practicaba la sodomía. A pesar de que esto también resulta una acusación muy cruel para muchos, para otros puede ser la cuartada perfecta para no llegar a creer que pudo haber habido tal engaño en torno a la iglesia católica. Lo cierto es que mientras unos se dedicaban a tapar la historia de la pontífice, otros le sacaban provecho al mostrarla como una lección preventiva a las mujeres que se quisieran pasar de listas.  
Hasta la fecha, La Santa Sede niega la ligera posibilidad de que el papa Juan VIII haya podido ser mujer e insiste en que estos son puros cuentos de los protestantes para desprestigiar a su religión.
Como quiera que haya sido, es interesante pensar fuera de lo normal e imaginarnos que hay un misterio tan grande que rodea los mitos teológicos que posiblemente sigamos en la ignorancia durante toda nuestra vida, pero el estar al tanto de la situación nos acerca a ellas y alimenta nuestro conocimiento y nuestro interés hacia nuestra propia religión.  

Publicado por: Anna López
annlova26@gmail.com


Referencias:



Martos Rubio, Ana. Papisas y Teólogas. Ediciones Nowtilus. Madrid, 2008.









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