viernes, 21 de septiembre de 2012

EL CONEJO DE ALICIA

EL PRIMER DÍA, LA NOVATADA

Ahora sí, ya pasé la entrevista, ya fui a comprar mis mejores trapos ¿Y ahora?

Pues los primeros momentos de angustia se avecinan,  ahora que ya lograste obtener el trabajo que tanto anhelabas, te das cuenta de todo lo que dejaste a un lado con esa decisión: salidas con amigos, convivencia con la familia, cumpleaños de los primos, el ejercicio, y entonces empiezas a dudar si tomaste la decisión correcta.

En fin,  llega ese lunes que tanto esperabas para presentarte ¿Cuál será tu cubículo? ¿Cómo serán tus compañeros? ¿Cómo me comporto? Y empiezan todas las dudas de que quieres ser en esta nueva etapa de tu vida, sin embargo bien tienes claro que ocultarás cualquier debilidad que pueda hacerte sentir incómodo.

¿Cómo fue mi primer día?
Hora de entrada: 9am (¡¡¡¡¡en punto!!!!)
Lugar: Nunca antes escuchado, eso quiere decir “sal de tu casa una hora antes, por si te pierdes”.
Nombre de la persona a la que buscas =  IMPOSIBLE DE RECORDAR igual a: repítelo hasta que te lo aprendas.

Llegué y con lo primero que me topé fue con un sinfín de pequeños cubículos o más bien escritorios, por supuesto era un edificio de varios pisos ¿Dónde será? Por más que lees  y lees.. no encuentras los letreritos, y si encuentras uno, es igual porque aun asi no sabes dónde pertenece que …Es como un laberinto lleno de ruidos de teléfonos, copiadoras, impresoras, gente caminando como si no hubiera mañana, y  justo en ese momento divagué y pensé todas las posibilidades de mí ahí sentada o corriendo y  cuando de repente   una voz fuerte pronunció mi nombre, y en eso desperté….

-          ¿Karen Fernández?
-          Sí, soy yo.
-          Sígueme por favor

Todos dicen lo mismo, es como el siempre baño “Al fondo y a la derecha”… en fin, mi jefe me habló sobre todo lo que iba a ser mi trabajo, me explico los horarios y en esos momentos me dije ¿Tanto quise de verdad trabajar aquí?  ¿No puedo regresar a mi vida? Es extraordinariamente desesperante la incertidumbre que sentí en ese momento, era un cambio radical y quizás ya no me sentía preparada para ello, o tal vez convencida al 100%. Pero era un momento de continuar con esta farsa de seguridad que tenía que proyectar.

Llegó un momento que ya no escuchaba lo que me decía, me perdí en un mundo de pensamientos y sólo escuchaba el eco de su voz borroso luchando con mi voz interna….

                Jefe - ¿Cómo ves? ¿Te late?
                Yo - ¡Perfecto! Todo súper claro y bien.

Justo ese instante vendí mi alma al diablo, a un postor desconocido que se iba a apropiar de mi vida por  mucho tiempo…

Cuando entré a la oficina, casi muero me di cuenta que las miradas me seguían, aquellas que le dicen uno al otro ¿Quién es o qué? Obviamente todos piensan que lo hacen muy sigilosamente, pero sigilosa fui yo al entrar y pasar desapercibida ante todo este nuevo equipo de personajes a los que me tenía que enfrentar.
Primera impresión: ¡Ya me cargó el payaso! ¿Cómo me presento? Son demasiados…. ¿Será que son buena onda o qué me harán la vida de cuadritos? ¡No seas mal pensada, gánatelos!

 Karen Fernández
ana_kbf@hotmail.com

Échale el comentario es necesario pa' que pase de año!! ¡Gracias People!

2 comentarios:

  1. Ana, el estilo me sigue gustando mucho: desenfadado y sin falsas posturas. Solo cuida detalles de ortografía y redacción como algunas comas antes o después de signos de interrogación, y que en español usamos signo de admiración e interrogación de apertura y de cierre(ya por correo te mandaré el texto con todas las correcciones).

    Recuerda también que el nombre de la entrega va subrayado.

    Saludos.

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  2. Me imagine en tu lugar jaja, tienes talento para escribir, deberias seguir haciendolo.

    Saludos.

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